Pixie – el gato portero

Voy a empezar con este articulo una serie llamada ¨Las historias de Pixie¨ . Como en las pelis americanas voy a contar primero una cosa del presente y luego iré poco a poco pasando por momentos del pasado que nos han dejado recuerdos.

El juego fue iniciado por Pixie. Primero empujaba solo la pelota hacia el sofá y luego se escondía para rechazarla . Luego ha empezado empujarla hacia nosotros como si nos pedía que chutemos y el se escondía para rechazar . Una vez, por error se la hemos tirado más por arriba y así el juego empezó a complicarse y el, poco a poco, se transformaba en un portero de verdad.

Cada vez más a menudo cuando entramos en esta habitación nos empuja la pelota y se sube en el sofá y la espera. A veces empuja la pelota en el pasillo y viene a buscarnos.

Se anima mucho con el juego, nosotros también y cuando ya no le da la ganas …lo tenemos claro… se planta. Es un gato muy listo y lo amamos mucho.

Mientras estábamos montando el video se quedo un rato mirando por la ventana pero luego se ha aburrido. Primero se ha subido en el sofá, miraba la pelota, nos miraba a nosotros. Al ver que hacemos el tonto ha empujado unas cuantas veces la pelota hasta nosotros , se iba deprisa en su posición … nosotros – nada, el otra vez. Entonces se ha subido en la mesa, encima el teclado sin dejarnos mirar la pantalla. Tuvimos que tomar turnos en jugar y montar a la vez. Siempre sale con la suya.

Y luego .. a descansar